La masoterapia engloba diferentes técnicas de masaje con fines terapéuticos con el fin de tratar enfermedades y lesiones. También se utiliza en diferentes procesos de rehabilitación.
Si estamos ante un objetivo terapéutico, es decir, para tratar una lesión, el masaje sólo podrá ser realizado por un fisioterapeuta cualificado.
Índice
¿En qué consiste la masoterapia?
En la terapia de masaje, un profesional médico capacitado y certificado manipula los tejidos blandos del cuerpo (músculos, tejido conectivo, tendones, ligamentos y piel). Los terapeutas de masaje utilizan diferentes niveles de presión y movimiento.
Las investigaciones sobre los beneficios del masaje muestran que estos pueden ayudar a reducir el estrés, reducir el dolor y la tensión muscular, aumentar la relajación o mejorar la función inmunológica. De hecho, las sesiones pueden durar entre 30 y 60 minutos, en función de los objetivos, del tipo de operación realizada y de la clínica en la que se realiza.
Se incluyen diferentes técnicas o modalidades de masaje, como el masaje terapéutico, el masaje deportivo, el masaje del tejido conjuntivo o el criomasaje, y técnicas como el drenaje linfático manual terapéutico o técnicas manuales neuromusculares.
Beneficios de la masoterapia
En función de la zona en que se aplique esta técnica, podemos encontrar diferentes beneficios, aunque los más importantes son:
- Los masajes mejoran la circulación sanguínea. Mejoran la capacidad de la sangre de transportar el oxígeno.
- Es efectivo para aliviar dolores, como por ejemplo dolores de cabeza causados por dolores musculares de la espalda y por la tensión nerviosa.
- Favorece el sistema muscular y la estimulación de músculos.
- Incrementa la elasticidad de la piel.
- Mejora la flexibilidad de las articulaciones.
- Ayuda a liberar endorfinas, reduce el estrés y combate la depresión.
- Estimula los órganos de la digestión.