Además de ser un deporte seguido como espectáculo en estadios y en televisión por millones de aficionados, el fútbol es uno de los deportes que más se practica entre personas de todas las edades. La razón es muy simple: el fútbol es uno de los deportes más completos que se pueden practicar, aportando importantes beneficios físicos y psicológicos.
A nivel psicológico el fútbol fomenta el trabajo en equipo, la socialización y la autoestima. A nivel físico mejora la coordinación, fortalece huesos y músculos, mejora considerablemente la capacidad aeróbica y es un excelente ejercicio para la salud cardiovascular.
Pero, el fútbol también requiere de una gran exigencia física tanto si se practica de forma lúdica como si su práctica es más profesional, y por tanto existen una serie de lesiones derivadas de la práctica de este deporte de las que hablaremos a continuación.
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¿Cuáles son las lesiones más frecuentes en el fútbol?
Los saltos, sprints, choques con otros jugadores, las caídas y las irregularidades en el terreno de juego pueden provocar una serie de lesiones que son bastante frecuentes en la práctica de este deporte tan popular. Te explicamos cuáles son las cinco lesiones más comunes en la práctica del fútbol.
Esguince de tobillo
El esguince de tobillo es una de las lesiones más comunes derivadas de la práctica del fútbol. La lesión se produce cuando tras un cambio brusco de dirección en carrera, un salto, un mal apoyo o un pisotón por parte de otro jugador, los ligamentos que mantienen los huesos de los tobillos unidos se estiran demasiado o se desgarran, produciendo dolor y afectando a la movilidad. Hay tres grados de esguince de tobillo, van desde el grado 1 que es el más leve, al grado 3 el más grave.
Tendinitis rotuliana
El tendón rotuliano es el que conecta la rótula con la tibia y apoya a los músculos de la parte anterior del muslo para extender la rodilla. Tras una sobrecarga o por movimientos inadecuados el tendón se inflama produciendo dolor y en algunas ocasiones dificulta la movilidad.
Desgarros de menisco
El menisco es un cartílago que se encuentra en el interior de la rodilla y se encarga de evitar el roce en la articulación y de amortiguar los golpes. Cuando se produce una torsión exagerada en la rodilla causada por algún golpe o un movimiento brusco, el menisco puede rasgarse e incluso romperse y es imprescindible una intervención quirúrgica para su recuperación.
Rotura del ligamento cruzado anterior
Una de las lesiones más graves que puede sufrir un futbolista es la rotura del ligamento cruzado anterior. Este ligamento se encuentra en el interior de la rodilla y es el que se encarga de darle estabilidad y evitar el desplazamiento de la tibia hacia delante con respecto al fémur. La rotura se produce cuando hay una fuerte torsión en la rodilla. Es una lesión que impide al lesionado mantenerse en pie y requiere de una intervención quirúrgica para reconstruir el ligamento y una larga rehabilitación.
Pubalgia
La pubalgia es un molesto dolor en la zona del pubis que se irradia hacia la ingle y el bajo abdomen. Es debida a la inflamación de diferentes músculos y tendones de la zona inguinal. Se produce por los movimientos bruscos en los cambios de dirección y también por la asimetría que se genera al chutar el balón con una pierna más que con la otra.