No ocurre siempre, pero en algunos casos, pacientes con cáncer de mama que se han sometido a una mastectomía, sufren como efecto secundario linfedema de brazo. Esto ocurre porque también se extirpan uno o varios de los ganglios linfáticos de la axila para comprobar y evitar que el cáncer se propague por el resto del cuerpo. 

¿Qué es el linfedema?

El sistema linfático está formado por una red de conductos que atraviesan los ganglios y por ellos circula un líquido llamado linfa que ayuda a prevenir las infecciones. Cuando uno o varios de estos ganglios son extirpados, provoca que el líquido linfático tenga dificultad para circular y se acumule en el brazo, provocando hinchazón, sensación de pesadez, dificultad para mover el brazo y tirantez en la piel. Este problema puede aparecer inmediatamente después de la cirugía e incluso bastante tiempo después. 

Cómo se puede tratar el linfedema

En cualquier caso, el mejor tratamiento para el linfedema siempre es la prevención. Uno de los mejores remedios es la movilización temprana del brazo mediante ejercicios específicos después de la cirugía. 

También hay que tener especial cuidado con el sol, evitar llevar el brazo demasiado tiempo colgando y coger peso. Es recomendable no dormir sobre el brazo afectado, no sobrecargarlo y prevenir caídas y golpes que puedan provocar un traumatismo

Es importante, ante la aparición de los primeros síntomas, acudir a un especialista para evitar que el linfedema se desarrolle puesto que cuanto más avanzado esté más difícil va a ser tratarlo. 

Pero, sin duda ninguna, la fisioterapia es el tratamiento más eficaz, tanto para prevenir como para disminuir el linfedema, tanto más si se aplica desde el primer momento tras la cirugía. Un fisioterapeuta especializado realizará una serie de tratamientos específicos para conseguir una recuperación óptima y duradera, que en un principio ayudará a prevenir el edema postquirúrgico y posteriormente ayudará a aliviar el dolor y a evitar, por lo tanto, que los músculos del hombro se retraigan.

 

 

¿En qué consiste exactamente el tratamiento de linfedema?

El tratamiento consiste en una terapia descongestiva. Compuesta por una combinación de sesiones de drenaje linfático manual para reconducir el líquido que está retenido y ejercicios específicos, siempre supervisados por el fisioterapeuta, ya que una mala realización de estos podría agravar el problema.

Además de esto, el tratamiento debe hacer especial hincapié en el cuidado de la piel del brazo afectado, ya que cualquier pequeña herida en un brazo con linfedema se puede infectar con mucha rapidez. También, en la mayoría de los casos se deben llevar manguitos de compresión que se hacen a la medida de cada paciente. 

A pesar de que el linfedema es un problema molesto y a veces complicado, en nuestra clínica Velázquez 22 analizaremos tu caso concreto para ofrecerte un tratamiento personalizado que ayudará a disminuir y estabilizar la inflamación de tu brazo. 

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